14 noviembre 2010

Las Ideas de un Niño

Foto cortesía de phaewilk Front Royal, VA http://www.linkedin.com/in/phaedrawilkinson
mommy2emjar@yahoo.com

Peor que Jaimito. Jaimito era aquel niño, protagonista de mil y una maldades en la escuela que se distribuían de boca en boca en formato chiste. Qué si le hacía tal o cuál cosa a la profesora, que si era el más listo de sus amigos...
Claro que con lo que pasa hoy en día en los colegios, Jaimito se ha quedado no sólo corto, sino pudoroso. Sus chistes se han convertido casi en chistes de convento.
Y es que los niños de hoy día, no sólo meten las tijeras en los enchufes o el gato en la lavadora.
Por quedar como el héroe ante sus compis, el tierno infante protagonista de mi post de hoy, se llevó a clase... una bomba de la segunda guerra mundial. El angelito.
Desde luego la armó gorda. Evidentemente, tuvieron que desalojar el colegio.

Últimamente no dispongo de tanto tiempo como quisiera y se está convirtiendo en costumbre. Así que me llega el momento de tomar aire y descansar blogueramente una temporada de duración incierta.
Muchísimas gracias a todos los que de una forma u otra, me habeis acompañado desde el 2007 con vuestros comentarios y vuestro cariño.

07 noviembre 2010

El Reloj da Marcha Atrás

Foto cortesía de: ppdigital Macon, Georgia USA http://www.darrenhester.com
Ver para creer se decía y se dice, pero el mundo cambia tanto, que los ojos ahora hasta engañan y la ciencia ficción se convierte simplemente en realidad pura y dura.
Aunque hemos disfrutado y reído con la transformación de Robin Willians en respetable anciana irlandesa y con la del actor Martin Lawrence en abuela de sobradas y repletas carnes, lo que sucedió en un viaje de Hong Kong a Cánada no deja de sorprender.
En Hong Kong emprendió viaje un anciano caucásico y en Canadá llegó transformado en joven asiático que pidió refugio en el país. No le valió rejuvenecer unos 30 años: también cambió de raza. Desde luego no le pasó a nadie más en el avión porque de lo contrario estaríamos todos ahorrando para el billete, que dejar unos cuantos años atrás así sin más y sin cirugía es una oferta inigualable.
No, todo fue fruto del latex, e imagino que también, de una buena representación.